Sobre el proyecto ·
Este proyecto es una invitación a superar la dicotomía entre naturaleza y tecnología, evidenciando cómo la IA habita y crea una ecología híbrida, constituida por relaciones de interdependencia entre agencias humanas y no-humanas.
Si habitualmente la IA se representa como una entidad inmaterial y desterritorializada, separada de toda relación con el mundo tangible, Ecología Híbridas busca rebatir esta narrativa al re-materializar los procesos detrás de la producción de la Inteligencia Artificial y su conexión con la Tierra.
En la medida que los imaginarios de la IA siguen discursos que invisibilizan la explotación de la naturaleza, instalando una percepción sobre el medioambiente como un conjunto de recursos elásticos y explotables, nos parece fundamental poner en discusión las interdependencias entre lo tecnológico y el medioambiente.
“Ecologías Híbridas” es llamado de atención a reconocer las ecologías terrestres que permiten el desarrollo de la IA. Es una interpelación a dejar de lado la conveniente, pero ingenua creencia de que habitamos en un planeta con recursos infinitos (agua, litio, cobre, silicio, cobalto, entre otros) para explorar nuevas formas de cohabitación entre la IA y la Tierra.
Reconocer que la IA se sitúa en una situación de límite planetario, implica explorar formas de cohabitación entre lo tecnológico, humano y la tierra, haciendo visible las alianzas y enredos híbridos que están detrás de todas las formas de inteligencia, ya sea orgánica, inorgánica o maquínica.
El desafío no sólo consiste en visibilizar la multiplicidad de agentes involucrados en el uso de la IA, sino sobre todo comenzar a explorar nuevas formas de sensibilización que incentiven una conversación respecto a cómo queremos cohabitar el planeta, integrando la innovación tecnológica en los límites terrestres que abre el antropoceno. Si bien un paso necesario consiste en rendir cuentas y comenzar a cuantificar explícitamente el consumo energético del desarrollo de sistemas de IA y obligar a las grandes compañías tecnológicas a declarar tales impactos; este problema también debe ser abordado desde el lenguaje de las humanidades y otros modos de involucramiento.
El proyecto Ecologías Híbridas constituye precisamente un esfuerzo colaborativo por explorar, desde las herramientas de la investigación-creación, las condiciones para abordar los impactos de la IA en el ecosistema terrestre.
Si la narrativa de la innovación en torno a la IA busca posicionar la noción de una inmaterialización de la modernización tecnológica, el proyecto Ecologías Híbridas constituye el esfuerzo contrario: hacer visible y tangibilizar el costo material y físico que tiene el uso de la IA.
El concepto de “Ecología Híbrida” que da título a esta investigación creación, es una invitación a pensar desde los enredos más que humanos que sustenta la IA, asumiendo el estado de vulnerabilidad y fragilidad en la que estamos inmersos.
En lugar pensar la IA desde la tradicional dicotomía entre naturaleza y técnica, buscamos insistir que la IA se constituye de ‘naturoculturas’ (Haraway 2005) conformadas de relaciones co-evolución entre múltiples agencias, especies y entidades.
Ecologías Híbridas es una invitación a pensar la IA como el resultado y efecto de estos ensamblajes, donde agencias humanas y terrestres se co-construyen en un tejido en constante evolución. Pero también es una impugnación a desplegar formas de resistencia especulativa frente a la compleja red de relaciones extractivistas y poder en torno a la industria de la IA.
El desafío no sólo consiste en visibilizar la multiplicidad de agentes involucrados en el uso de la IA, sino sobre todo comenzar a explorar nuevas formas de sensibilización que incentiven una conversación respecto a cómo queremos cohabitar el planeta, integrando la innovación tecnológica en los límites terrestres que abre el antropoceno. Si bien un paso necesario consiste en rendir cuentas y comenzar a cuantificar explícitamente el consumo energético del desarrollo de sistemas de IA y obligar a las grandes compañías tecnológicas a declarar tales impactos; este problema también debe ser abordado desde el lenguaje de las humanidades y otros modos de involucramiento.
El proyecto Ecologías Híbridas constituye precisamente un esfuerzo colaborativo por explorar, desde las herramientas de la investigación-creación, las condiciones para abordar los impactos de la IA en el ecosistema terrestre.
